Cantareiras. Oralidad, creación, transmisión es una muestra producida por el Museo do Pobo Galego con motivo del homenaje del Día das Letras Galegas 2025 a las creadoras y transmisoras de la poesía popular oral. Ideada y producida por el equipo técnico de la entidad, es el fruto de varios meses de investigación en los fondos del proyecto de recuperación, catalogación y digitalización del Archivo del Patrimonio Oral de la Identidad del Museo do Pobo Galego, así como en su archivo gráfico, documental y en los fondos de su colección.
La exposición toma como hilo conductor la cadena de transmisión de la oralidad y la poesía oral, desde las primeras recopilaciones hasta la transición y la democracia, pasando por las recogidas realizadas por el Seminario de Estudos Galegos y la recopilación de músicas de tradición oral durante la dictadura, llegando hasta la situación actual de la poesía oral. Ese hilo de transmisión que teje toda la exposición, y que da protagonismo a las voces femeninas, se personificó esta tarde en las voces de Rosario y Carme das Marías, pandereteiras y cantareiras de la asociación Raigañas, madre e hija, que pusieron la música en esta jornada inaugural.
Piezas materiales, documentos bibliográficos, sonoros y audiovisuales
Entre los materiales expositivos, la muestra alberga una selección bibliográfica, en la que destacan tres recopilaciones de las que el Museo posee los originales: el Cantigueiro popular da Limia Baixa recopilado por Xaquín Lorenzo, las Aportacións ó cancioneiro de Cotobade recopiladas por Antonio Fraguas, además de la Colección de cántigas da Mahía realizada por Luis Tobío Campos en el año 1880, que se conserva en el Fondo Xaquín Lorenzo.
Una mirada con perspectiva de género que constata el papel determinante de las mujeres en la creación, preservación y difusión de este saber inmaterial, tal y como ya apuntaba en el siglo XVIII el Padre Sarmiento, autor de una de las primeras recopilaciones de poesía oral. Además de los fondos pertenecientes a la biblioteca del Museo, se analizaron los archivos de Alan Lomax y de las Misiones Folklóricas del CSIC (1954–1960), por ser fuentes de acceso público anteriores a la creación del APOI del Museo do Pobo Galego. Toda esa información, sumada a los registros sonoros y documentales custodiados en el archivo sonoro de la institución, fue el punto de partida del trabajo expositivo. Una labor que se vio enriquecida con las pesquisas realizadas en paralelo a partir de una treintena de entrevistas a personas vinculadas con la música de tradición oral gallega y que derivaron en la cesión temporal al Museo de piezas y materiales sonoros, fotográficos y de vídeo, así como en la realización de una pieza audiovisual de corte documental que forma parte de la exposición.
Así, además del contenido bibliográfico, la muestra se compone de paneles informativos y una amplia selección de materiales sonoros, que permiten escuchar las voces de muchas informantes a través de códigos QR y pantallas interactivas. Completan la muestra panderetas y otros instrumentos musicales tradicionales, materiales discográficos, carteles, fotografías y otras piezas que pertenecen, algunas, a la colección del Museo y otras han sido cedidas por recopiladoras y recopiladores, por agrupaciones o incluso por familiares de algunas de las cantareiras homenajeadas en el Día das Letras Galegas. Entre ellas, la pandereta de Rosa Casás, cedida por su nieto Richi Casás; o la de Teresa Lema Varela, que llegó a la exposición de manos de su nieto Jorge Blanco Varela. También se incluye un vídeo casero con grabaciones de Eva Castiñeira, aportado por uno de sus hijos para formar parte de esta muestra que busca musealizar un patrimonio vivo que, como tal, necesita seguir siendo investigado.
El recorrido de la muestra concluye con una pieza audiovisual realizada expresamente para la ocasión, que recoge una treintena de entrevistas con informantes, familiares, personas recopiladoras, estudiosas y artistas vinculadas con esta institución.
La muestra, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Santiago, la Diputación de A Coruña y la Xunta de Galicia, podrá visitarse en el claustro alto hasta el 28 de septiembre, en el horario de apertura del Museo.